“Yo
no voy a votar porque el resultado de las elecciones está ya
decidido: el gobierno va a ganar….. Todo los mecanismos que tienen
que ver con los procesos electorales están controlados por el
gobierno y por lo tanto ya se sabe quien va a resultar triunfador “.
Esa era la manera de pensar de mucha gente que argumentaba eso para
no ir a votar y declarar que se iba a cometer un gigantesco fraude.
No tengo elementos de juicio para avalar o refutar ese tipo de
afirmaciones pero lo que si puedo, es enfocar este problema desde el
campo de mi disciplina: la Sociología.
El discurso arriba expuesto
es la más fiel expresión de un tipo de pensamiento que puede ser
denominado como “Profecías auto-realizadoras” o autocumplidoras
(Thomas) porque el sujeto que està dominado por esta manera de
pensar parte de la idea de que lo que es verdad (aùn siendo
imaginario) en el pensamiento puede ser verdad en el campo de lo
real, de la acción.. Un sujeto que piensa firmemente que algo malo
va a suceder, de una manera inconsciente puede hacer todo lo posible
para que las cosas se den como lo ha pensado.
Es la lógica del
sujeto fatalista y negativista que piensa que él por sì mismo no es
capaz de realizar una tarea que se le ha asignado o una meta que se
ha trazado. Este sujeto finalmente fracasa porque su Yo puede estar
fuerte y crónicamente afectado. Es lo que se ha denominado el
paradigma de “La auto-eficacia afectada” (Bandura, .Estos estados
subjetivos son muy propio de sujetos profundamente alienados y por
tanto dominados por los “Otros poderosos” (Dios, los santos, los
Otros del poder, el imperialismo, el destino, etc.) o sociedades en
donde hay un “bloqueo cognitivo” de su acción como las
sociedades subdesarrolladas y dependientes que creen que no pueden
llevar a cabo las acciones de transformación social en forma
autónoma de su situación de alienación precisamente por el dominio
de los “Otros poderosos”.
En el caso de las recientes elecciones
pudimos observar claramente este fenómeno. La casi totalidad de los
votantes que adversaban el régimen eran partidarios de que todo el
“juego estaba arreglado” y de que nada se podía hacer para
cambiar esa situación.
Es por eso por lo que la abstención fue
aproximadamente de 52% del padrón electoral; vale decir màs de la
mitad. Un simple razonamiento puede determinar que si al menos la
mitad de esos abstencionistas hubieran ido a votar probablemente su
voto hubiera superado el total de los votos del gobierno.
Siendo el
padrón electoral de 20 millones de votantes y siendo la abstención
en números absolutos de doce millones, la mitad el 52% hubiera sido
6 millones de votantes aproximadamente. La idea de “no votar” fue
la consigna que dominò el espectro motivacional de la casi
totalidad del universo elctoral de la oposición.
La sociedad
venezolana, al igual que otras, tiene algunos rasgos que dibujan un
cierto perfil suicida y depresivo socialmente. Fatalismo,
externalidad, negativismo, bajo nivel de motivación al logro,
resignación-adaptaciòn a las situaciones negativas, etc.
Esos
rasgos pueden tener su origen en el carácter sociohistórico de una
sociedad y un sujeto oprimido, sumiso y que se adapta a todo. Un
Sujeto que se percibe negativamente y aunque a veces somos muy
violentos y reactivos, eso no hace màs que confirmar la hipótesis
de un pueblo caracterizado por una “Matriz de una subjetividad
dependiente de Otros poderosos”.
1 comentarios:
Este artìculo intenta utilizar un paradigma proveniente del funcionalismo sociològico para explicar el comportamiento de una persona o grupo de personas que en razòn de un esquema asumido como real aunque partiendo de premisas imaginarias orienta la acciòn. En este caso se trata de explicar el comportamiento de un vasto sector de la poblaciòn durante el ùltimo proceso electoral en Venezuela. Es la lògica del sujeto que cree que todo està ya preparado para su fracaso y por lo tanto se inhibe dejandole el terreno libre al quien dice que es el responsable de su fracaso. Esto supone todo un "sìndrome de deseseperanza aprendida" y "autoeficacia afectada". No se puede hacer nada porque todo està decidido, todo està preparado; por lo tanto el fracaso està garanztizado de antemano; pero la realidad es mucho mas compleja de lo que supone esta manera de pensar.
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